Cómo limpiar una alfombra

Las alfombras son un importante elemento decorativo y, además, ayudan a conservar el calor en invierno

Es necesario limpiarlas en profundidad para tener la casa libre de gérmenes

Te contamos varios trucos caseros para mantenerlas como nuevas sin dañar el tejido

Las alfombras son un elemento que sirve tanto para decorar el hogar como para conservarlo caliente en los meses más fríos. No obstante, mantenerlas impecables puede convertirse en todo un reto, y todavía más si tienes niños o mascotas en casa.

La limpieza de las alfombras no es solo una cuestión estética, sino que también es importante para tener la casa libre de gérmenes. Para conseguirlo, no basta con pasar el aspirador una vez por semana, sino que es recomendable realizar de vez en cuando una limpieza en profundidad en casa y llevarlas a la tintorería una vez al año.

Te explicamos varios remedios caseros para desinfectar tus alfombras y mantenerlas como nuevas con productos naturales y según el tipo de material.

Cuidados específicos según el material

Antes de iniciar la limpieza en profundidad de tu alfombra conviene conocer su material para saber cómo dejarla como nueva sin dañarla.

Si la alfombra es de lana pura, primero sacude y aspira la suciedad. Después, frota con un paño mojado en agua fría y jabón neutro. Si la alfombra es de gran tamaño, lo mejor será llevarla a la tintorería. Recuerda recoger este tipo de alfombras en verano para que las polillas u otros insectos no las destrocen.

Por otro lado, puedes meter las alfombras de algodón en la lavadora con un programa de agua fría y sin centrifugado. Si no cabe en el tambor, lávala a mano pasando un cepillo mojado con agua y desengrasante. Deja secar en el interior si es de colores vivos o al sol si es de tonos neutros.

Las alfombras de fibras naturales deben aspirarse, como mínimo, una vez por semana. Para realizar una limpieza profunda puedes pasar un paño impregnado con agua y jabón neutro y aclarar. Evita frotar y el sol directo. Si la alfombra es de bambú, bastará con aspirarla y aplicar de vez en cuando un aceite especial para su conservación.

Productos caseros para limpiar alfombras

Si a pesar de realizar las limpiezas recomendadas para cada material sigues sin conseguir eliminar la suciedad, puedes probar los siguientes métodos caseros.

La vaporeta es una de las alternativas más eficaces para eliminar el polvo y las impurezas sin dañar los tejidos. Para ello, sigue las instrucciones del aparato y pásalo dos veces por cada zona de la alfombra.

Si no tienes vaporeta, pero sí aspirador, también puedes conseguir unos muy buenos resultados con bicarbonato de sodio, uno de los mejores productos de limpieza natural. En el caso de las alfombras, ayuda a eliminar el polvo y las bacterias y a neutralizar los malos olores. Para utilizar este método esparce una mezcla de bicarbonato y sal a partes iguales por la superficie a tratar y deja actuar, como mínimo, una hora. Después, aspira los restos.

Otro remedio similar y especialmente efectivo contra las manchas de aceite o de grasa es el uso de maizena o almidón de maíz. Para ello, esparce el producto sobre la zona a tratar y deja reposar unos 30 minutos. Finalmente, pasa la aspiradora y repasa con un cepillo.